Uno de los atractivos de vivir en una gran ciudad, es que por donde vayas, siempre encontraras tres cosas en el camino: buena comida, buenos ruidos y buenos gays.Hoy se ha convertido en casi una obligación moral, que cada gay del interior que viene a Lima tiene que, por lo menos conocer antes de regresar, el centro de Miraflores.
Pero el distrito de Jesús Maria no se queda atrás. Y ni que decir del Centro Histórico de Lima. A este paso, nos convertiremos en la primera ciudad gay del Perú.
De hecho, hasta estamos en la agenda del gobierno municipal. Recibí una invitación por e-mail, de parte de uno de los regidores de nuestra flamante alcaldesa. Quería reunirse con la comunidad citadina gay. El asunto: Revisar el tema: “UNA LIMA DIVERSA Y PARA TODOS” .
Era oficial, la comunidad gay limeña tendría el respeto por el que tanto luchamos. Nuestros derechos humanos serían tomados en cuenta.
Y luego de evaluar la mencionada invitación, con miembros del actual gobierno edil, no pude evitar preguntarme:
¿nuestro “juego de colocaciones en la sociedad” tiene nuevas reglas? Y si con estas nuevas reglas de convivencia… ¿ganásemos más detractores que cómplices? Tal vez vivir en una sociedad libre de homofobia no este aun en nuestro entendimiento…entonces… ¿tendríamos que dramatizar con nuestra propia intolerancia?..Y si estas nuevas circunstancias en el mapa de la inclusión gay, resultase como el “mapa del pirata”… ¿estaríamos preparados para recibir el “tesoro” ?...y que hay de nuestro masoquismo existencial… ¿lo arrojaríamos del tablero de juego? ¿La tranquilidad y la calma vencerían a la paranoia gay?
Finalmente me dije:
…En una futura lima diversa, tolerante y respetuosa; los gays de esta ciudad… ¿nos emparejaríamos más o menos?
De hecho, seria mas divertido jugar a las relaciones. Camino a casa Aidan me llamo al móvil. Iba ganando en el “juego”.
